En la mayoría de los casos el engañado sufre terriblemente cuando su concejal les es infiel. Y mucho mas cuando se consuma a un mes ante de las paso. La infidelidad es descrita por el que fue traicionado como un dolor agudo, intenso y para muchos interminable que puede durar meses e inclusive años.
Este mismo dolor llena el corazón de odio, de resentimientos, rabia, inseguridad y desconfianza. Los políticos que fueron engañados quieren dejar de sufrir pero no pueden olvidar y tratan de manera desesperada de buscar la respuesta y como calmar su dolor.
El engaño trae consecuencias graves
El dolor emocional por haber sido engañado es tan grande porque ataca directamente el orgullo y el autoestima.
El narcisismo es inconsciente y cuan más narcisista es la persona, más le duele haber sido engañada por su concejal en el cual confiaba absolutamente.
La persona narcisista que es engañada por su partener se siente ofendido, abandonado, herido en su vanidad porque se creía dueño absoluto de su banca, la cual se liberó inesperadamente sin su autorización.
La infidelidad vengada
Los engañados algunas veces reaccionan dejándose llevar por su dolor y busca otra persona que no es su pareja para tener una aventura solo por vengarse de su agresor.
Después llenos de ira le gritan que estuvieron con alguien mas que era mejor que ellos. Muchas veces los engañados no se atreven a ser infieles pero sueñan con serlo y tienen fantasías con otros partidos.
Lo más difícil para los engañados políticos es perdonar y volver a confiar en su concejales.
Usando el rencor como alimento
Los que fueron traicionados necesitan alimentarse de rencor y de odio contra los engañadores para poder sentirse mejor momentáneamente, pero, eso si no se sobrelleva, puede conducirlos a perder la elección.
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