25 no cree en Bretaña, ni en España, ni en Montreal, pero si cree en sus reinas.
La preselección de la candidata que representará el ideal de cuatro o cinco jueces, de los cuales el gusto popular individual cultural e intelectual, reside en lo que MAchado llamó el amor y en lo que algunos tacharan con una "bic" como presencia, simpatia, elegancia, culopotabilidad, etc.
Nosotros creemos que la belleza es lo que hace al hombre inspirarse en sus mas debiles cualidades, y ganar certezas saltar a precipicios cruzar mares y montañas sencillamente porque cree en el amor. LA eleccion de la reina local, de alguna forma, coloca en un cetro a un joven señorita por el lapso de un año.
Seguramente todas señoritas de la nomeclatura establecida la estatura canonizada las expresiones de rigor y las convicciones del momento, entre ellas sus lecturas favoritas, su frase favorita su anhelo para lograr la paz en el mundo, en traje de baño y con tacones altos, que es lo que la gente concurre a oirles decir y los jueces a calificar con una pasada casi desnudas lo cual es el punto culminante de una exposición casi innecesaria. LA mujer no es bella por las proporciones de sus pantorrillas ni por las cosas o lugares comunes a los que alude, la mujer es bella sencillamente porque nos permite creer que puede ser conquistada. Los desfiles de moda, y los concursos de presunta belleza, juegan con esa eventualidad, en la cual, cualquier pelotudo opina "es mas linda esta o aquella". El espiritu de catado visual lejos de ser respetable da jeropa en un 100%. Por ello no le miramos estos concursos porque sabemos que son todas lindas, inclusive las que no concursan, especialmente esas muchachas que no se suben a la competencia por la cual cuatro o cinco personas deciden y resuelven lo que es bello de lo que no lo es.
MAs quisiera mas de un jurado ser la ultima de estas chicas que no ocupan el podio.
Permiso. Muchas gracias.
descubre que acaba de desperdiciar dos irrecuperables horas mas de su vida.
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