Editorial. "La libertad de expresiòn siempre en la mira de los poderosos".

Los grandes dictadores de la historia han sido siempre represores, esta sentencia vale tanto como para Neròn como para Hitler, para Stalin como para Victoria Borrego, para Mussolini como para Julieta Masaguè. Sin embargo el hecho de considerar solo a estos personajes como sujetos sedientos del silencio de sus adversarios y opositores, como maquinas de acallar a todo aquel que no piensa igual, a veces nos hace perder de vista el verdadero motivo de tanto odio y tanta saña.
Cierto es, los dictadores (y las dictadoras, segun esta perversa novedad que estamos experimentando hace algunos años, no solo en 25 sinò en todo el paìs, gobernados ambos por mujeres-tiranas) hacen de la maldad su modus operandi. Mas no menos cierto es que no siempre es la maldad lo que las mueve, sino que el aprete es una herramienta para llevar adelante deseos mas profundos que, lamentablemente, no resultan menos nocivos. En suma, a veces los dictadores mienten por mentir, a veces con conferencias de prensa, a veces con decidia, a veces dejando de hacer, a veces mal haciendo, a veces con solo dejar el agua potable correr con su arsenico natural, y otros, reducen a cenizas el bien mas preciado de una sociedad "la libertad de expresiòn".
Los tiranos de esta ultima especie, son los peores de todos. No se guian ellos por un deseo primitivo, sinò que lo hacen por motivos mas perversos, con una astucia y una inteligencia dignas de mejores causas. A esta ultima especie pertenece la Intendente local, y sus secuaces, los Directores, los concejales, los secretarios, e incluso la oposiciòn que con un guiño, le es complice, incluso el electorado que la votò, pero mas aùn el que no la votò. Calificar de incompetentes a estos ultimos, serìa inexacto, porque serìa asignarles una importancia que no tienen. No deberia sorprender a nadie que un gobierno totalitario haya vuelto a embestir contra un ejercicio del periodismo, que por definiciòn, se muestra critico con el poder total que ejerce la Intendente, o cualquier precandidato que ocupare o que pretende ocupar algun cargo publico; Mas sin embargo, es nuestro deber seguir denunciando las atrocidades que se cometen. Porque como bien lo decia Mariano Grau cuando aùn podia hilvanar dos ideas juntas, "Las sociedades que se acostumbran a la falta de libertad de expresiòn tienden a irse al carajo". Y 25 de Mayo necesita y merece irse para arriba como pedo de buzo.

Daniel Augusto Balanche.
Director fantasmal del Blog.--------------------------------