En nuestro medio, muchos vecinos están padeciendo serios problemas gastro intestinales a consecuencia del consumo de agua potable. Las autoridades locales no se han referido al respecto, pero sin embargo puede notarse aún en horas diurnas un elevado contenido de cloro, lo que implica que el "cloro mata todo".
Este inconveniente, se suma al creciente e indiscriminado consumo de este líquido vital, ya que las autoridades deben abastecer además, para esta estación, a mas de setecientas piletas en el éjido urbano de la planta urbana.
Muchos habitantes creen que este es un recurso inagotable, sin embargo, el estado desenvuelve una importante cantidad de dinero para que todos tengamos agua potable en nuestros domicilios.
La otra cuestión:
Es obvio que nuestra planta de aguas corrientes no da a basto. A través de información de voceros municipales, nos informaron que solo el 13% de los contribuyentes abonan la tasa de servicio de agua . Así, en forma obvia, no hay billetera que aguante.
Entendemos que nadie va a tener mala voluntad de mandar a los domicilios agua no apta para consumo humano, pero a través de nuestra columna de opinión, manifestamos que se necesita tomar conciencia que tanto proveedor y nosotros los usuarios debemos ponernos las pilas. Ellos dando un buen servicio de agua potable y nosotros que se necesita mayor infraestructura y mayor inversión de dinero , y eso, debería salir de las tasas que no pagamos.
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