
Los cadaveres de unos perros tirados en el calle esta mañana, con las marcas de las cubierta sobre la andanada de sus estomagos muertos, indica que este pueblo tiene miedo, y cualquiera como yo puede ver el verdadero rostro de la gente.
Si las calles son canales como entrañas estiradas
entrañadas llenas de sangre y llegue el momento en que deba evacuarse y llegue al desague y se haga una costra, todas las alimañas van a ahogarse en la mugre acumulada de sexo, crimenes y delito, y será espuma hasta sus cinturas y todas las putas y los politicos van a mirar a lo alto
y gritarán "Salvennos" y la ciudad susurrará "no".
Ahora todo el mundo se para en el borde, mirando hacia abajo en un infierno de mugre,
y los liberales e intelectuales, y esos tipos que hablan "suavecito", de repente ninguno puede pensar en algo para decir, debajos suyo, esta ciudad horrenda, gritando como un matadero de chicos retardados, con el hedor de la noche a fornicación y conciencias sucias, retribución es lo que se obtiene.
Normales, eso es lo que muchos dicen tener, una vida "normal", caminan por las calles de una ciudad agonizante en rabia, furiosa, dejan atras a las cucarachas humanas, ignoran el paco y el abuso infantil, ¿realmente se sentirán normales? Que necesidad tiene el injusto de de ocultarse?
Mejor es esconderse entre la gente, a la vista de todos.
Porque hay bien y hay maldad, y la maldad debe ser castigada, y mientras un flacido lloriqueo, las victimas de su propio indecente estilo de vida, ven oscurecida la visión de un presente
Las cosas son asi, llueve tanto para el justo como para el injusto. Y todos tenemos un poco de ambos. Nuestros dias estan contados en numeros, hasta entonces, a arrastrarnos hasta nuestros agujeros de una sociedad que no revive de sus propias cenizas....
El ansiado sueño de libertad se hizo realidad, es lo que hoy hay. Dios no hizo al mundo como es, nosotros fuimos.
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