En algunos lugares es costumbre, en las grandes ciudades es un lujo, pero cuando uno se quita los zapatos, cuelga la hamaca, pone la música de su gusto y se duerme durante ese invalorable ratito, casi tiene la garantía de que irá a un mejor lugar.
Investigadores del Allergheny College de Pennsylvania (EE UU) demuestran que una siesta diaria de al menos 45 minutos hace que disminuya la presión arterial de quienes han sufrido un día de estrés con mucha tensión psicológica.
Según afirman en el último número de la revista International Journal of Behavioral Medicine, las largas jornadas laborales, el trabajo por turnos, la televisión e Internet están afectando en la calidad del sueño, hasta el punto de que los ciudadanos duermen una media de casi dos horas diarias menos que hace medio siglo. Esto afecta a la salud a largo plazo y, de hecho, hay estudios que relacionan la falta de sueño con un mayor riesgo de hipertensión y problemas cardiovasculares.

La siesta, Van Gogh
De este modo, observaron que la siesta parecía tener un efecto reparador en los estudiantes ya que, aunque en todos la presión arterial y el ritmo cardiaco aumentaba durante el inicio de su jornada, aquellos que dormían siesta presentaban un descenso de ambos marcadores. Estos resultados eran más evidentes cuando los estudiantes dormían entre 45 y 60 minutos al día.
Según los investigadores, "los hallazgos sugieren que la siesta puede acelerar la recuperación cardiovascular después de una situación de estrés mental".
Dorsa, invertí en sillones para la siesta para tus empleados vas a ver que te rinden más asi!!!
ResponderBorrar