Nota del mejor Lancero de Calfucurá hablemos de Economía local 2

En el anterior artículo habíamos hecho referencia a algunos de los factores que influyen en nuestra economía local y la importancia que tenia, que el estado municipal a través de sus instituciones legislara y efectuara un ordenamiento legal con el objetivo de evitar la excesiva fugas de capitales locales, tratando de que no se provoque en la ciudad la llamada recesión económica.

Habíamos hecho referencia además de la aplicación de créditos, como generadora de recursos para el movimiento de la economía, cuestión esta que desarrollaré en otros capítulos a posteriori.

Uno de los objetivos buscados es la reactivación de la economía local, la cual, pueda ser sustentable por sus propios medios, sin los excesos de los sistemas asistencialistas  provistos por el estado, que han logrado que dichos emprendimientos cayeran en una gran mortandad de micro emprendimientos, ya que al no poder mamar la teta del estado mueren por inanición económica. Es por ello que los sistemas asistencialistas han fallado, pues es menester que el estado cumpla otro rol en el fortalecimiento de las empresas, y ese rol al que refiero puede cumplirse con métodos tutorialistas.

Tuve el privilegio en el año 2007 de efectuar un informe para el Ministerio de la Producción de la Nación, donde daba cuenta de los factores por los cuales tantos micro emprendimientos, y tantas pymes sucumbían después que el estado provincial, municipal o nacional,  les soltaba la mano.

Es que la viabilidad debe ser la primera regla para crear una fuente sustentable de divisas, generadora de puestos de trabajo estables, si no se tiene en cuenta esto, se corre el riesgo de perder valioso tiempo, oportunidades y lo mas importante mucho dinero.

En segundo lugar se debe apuntar a las necesidades de la ciudad y trabajar sobre ello. Comencemos a puntualizar una de las mismas en donde nos enfocaremos:

En la Planta Urbana de 25 de Mayo existen 1400 negocios inscriptos. De los cuales un gran porcentaje, se dedican a la comercialización del rubro ropa e indumentaria; para niños, damas, caballeros y accesorios de moda.

Un porcentaje mínimo obtiene su mercadería de proveedores locales, ya que su mayoría adquiere los productos de indumentaria que luego consumimos todos de capital federal o provenientes de la Feria de La Salada. La idea radica en fomentar y subvencionar micro empresas para que gran parte de esa mercadería sea producida en nuestro medio. Mano de obra hay mucha que puede hacerlo, el principal escollo radica en fabricar y no tener a quien vendérselo. Ahí donde el estado debe cumplir el rol tutorialista para que el circuito económico funcione, ayudando, cumpliendo el rol de "padre", fomentando, protegiendo, promocionando y subvencionando los productos locales para consumo interno, tratando asi que los comerciantes locales  adquieran fuera de nuestro suelo solo lo indispensable y el dinero de los clientes no se valla de la ciudad y se vuelva a reinvertir, completando un  circulo donde el dinero local  no se exfolie hacia otras tierras, sino vuelva a reinvertirse en el mercado local, originando el fortalecimiento de emprendimientos y en consecuencia puestos de trabajo sustentables por si solos.

Antes del lanzamiento del plan, es menester efectuar un estudio de mercado local donde se establezcan cuales son los artículos de indumentaria que mas se consumen en la ciudad, como así también, las variaciones de consumo según los regímenes estacionarios, (obvio que la gente no va a comprar ojotas en invierno), y partir de parámetros y estadísticas firmes para comenzar a fabricar.

Es  sin lugar a dudas una de las ideas que se puede utilizar para la reactivación de la economía local y salir de este estancamiento económico  y del marcado ostracismo de ideas claras que padecemos desde hace ya mas de una década. No esperemos mágicos salvadores ni gobiernos dadivosos, si no nos salvamos nosotros los Veinticinqueños, si no le ponemos amor a nuestra tierra, nadie nos sacará del pozo.

Tenga el señor lector la amabilidad de considerar este modesto aporte.