Anónimo dijo...
Su gobierno gris dilapido la imagen de gobernante desafortunado.Hay que aguantar tres años mas, pero Grau no va mas…No solo los vecinos lo dicen, sino algunos funcionarios extremadamente cercanos al intendente y que pretenden constituirse como candidatos para el 2011. Martín PellsTodos sabemos que mucha gente lo votó ante la falta de un candidato mejor, es decir, voto al que consideraba menos peor. Pero un año de este nuevo mandato fueron suficientes para despejar dudas en el electorado: esta gestión no da para más.En este último año los errores han sido grandes y evidentes, y la continuidad en el mandato no estuvo en peligro gracias a la mayoría oficialista en el Honorable Concejo Deliberante, y la tibieza de los opositores, porque la falta de cumplimiento de los deberes de funcionario público es algo fácilmente demostrable: las legislaciones vigentes no se cumplen; el trabajo de algunas áreas que en el mandato anterior mostraban proyectos y actividad han desaparecido (bromatología, cultura, promoción económica, vialidad municipal) a lo que debe sumarse la incipiente y ya interrumpida actividad de pequeñas obras municipales esbozadas en la campaña 2007. Ni los servicios públicos básicos dejan conformes a los vecinos y contribuyentes. Es más, se desconoce los días y horarios en que Grau cumple sus funciones.La gran adhesión y simpatía que protegía a Grau como un alo mágico ha desaparecido. Y la exclamada y reconocida honestidad ahora son palabras que se guardan discretamente ante la suma mensual que percibe por los servicios que presta al común, él y sus funcionarios.Gobierna un intendente ausente y la gestión administrativa está en manos de una funcionaria devenida en una suerte de vice intendenta. El resto de los secretarios y directores tienen un desempeño al que no es necesario calificar, pues la actividad de horario reducido se limita a firmar ordenes y resolver lo temporalmente inminente. Y el desconocimiento de los trabajos de áreas es tan real como la incomunicación entre los funcionarios y el primer mandatario. La actitud autoritaria de Grau se agudizó con el paso del tiempo, y quienes trabajan con él lo saben y adoptan posiciones sumisas. Es un extraño autoritarismo, porque quien desconoce la actividad comunal supondría el ejercicio de fuertes controles sobre los empleados, aún para imponer sus decisiones irreflexivas y caprichosas. Pero no es así. Todo lo contrario. El dejar que todo decante por si solo es el parámetro común. En lo político es totalmente intolerante, y la unión con otros sectores (como el ARI) se resquebraja día a día por cuanto la supuesta integración solo se registra en dos momentos: uno fue en la campaña 2007; y la otra en el HCD cuando requiere del voto de la mayoría para mantener la inmunidad de su gestión.El problema se presenta con miras a las elecciones 2009, porque si bien tiene una gran cantidad de votos cautivos (en los empleados municipales que disfrutan de un trabajo sin exigencias ni horarios), la posición populista ha decaído en este año por falta de dinero y si bien el presupuesto para 2009 es mayor, los gastos en salarios también lo es. Ya no tiene posibilidades de fragmentar para seguir reinando, porque después de la atomización o dispersión radical no tiene posibilidad de generar antagonismos que lo dejen ser victima de otros, para jugar a la novela rosa con los electores. Y la UCR no está dispuesta a recibirlo nuevamente porque jamás considero en su gestión los proyectos de origen partidario. El intendente ha agudizado su visión hegemónica del control y del poder. Los únicos funcionarios que aparentan poder real de gestión son aquellos que defienden un proyecto confuso y contradictorio. Casualmente son aquellos sobre las que caen sospechas por compras sobrevaluadas y por favorecer en adjudicaciones a empresas ineficaces y cuyas obras millonarias sencillamente no funcionan.Mientras, la sociedad espera incomoda alguna señal de ocupación por el bien común.Y esa incomodidad podría traducirse en las urnas si la oposición logra construir una propuesta que vaya mas allá de ciudadanos que quieran hacerse de un puesto para cobrar. De la interpretación de lo que dicen vecinos en diferentes lugares, lo buen visto y esperable en un político elegible, no sería solo la oratoria ni un partido determinado, sino que demuestre que ha resuelto lo económico en su vida particular y esta dispuesto a ‘ponerse la camiseta de 25 de Mayo’, y nos aleje de esta gestión afectada por una narcolepsia crónica, beneficiada por la coparticipación que como una subvención le hizo posible a Grau 9 años en el devaluado sillón de Don Liborio Luna.Aún cuando las elecciones venideras solo sean legislativas, un resultado adverso podría ser para Grau un punto de inflexión que lo posicione más cerca del ideal popular: que ejecute, que proyecte, que gestione, que sea mediador, que dé a conocer su trabajo, que asista a su lugar de trabajo, que reciba a la gente, que genere recursos, que recupere a 25 de Mayo, que deje de financiar actividades privadas o sectoriales que no tienen que ver con el bien del pueblo. La situación de la oposición no es menos problemática porque la gestación de nuevos lideres político está cercada por egoísmos perpetuados en las conducciones y el descreimiento general hacia ellos y los partidos a los que representan. Por esto, hoy más que nunca la ciudadanía debe comprometerse en la participación de una causa común. Termina 2009 y se lleva el ya opaco lustre de una gestión democrática a la que aún le faltan 3 años por recorrer. En el respeto por las instituciones es que el cuerpo legislativo local debe fortalecerse no para criticar y agotarse en ‘chacharas’ de palabras rebuscadas de los figurones, sino en ocuparse de cumplir con su rol y su función. El “agotamiento” del modelo de Grau no ha llegado a su máxima expresión. La improvisación se evidenciará aún más cuando la crisis anunciada para marzo – abril paralice las cuentas municipales. Parece un contrasentido que ante una situación como esta, los medios de comunicación mantengan una actitud servil y de espera. Seguramente la pauta política del 2009 los reavive.
Su gobierno gris dilapido la imagen de gobernante desafortunado.Hay que aguantar tres años mas, pero Grau no va mas…No solo los vecinos lo dicen, sino algunos funcionarios extremadamente cercanos al intendente y que pretenden constituirse como candidatos para el 2011. Martín PellsTodos sabemos que mucha gente lo votó ante la falta de un candidato mejor, es decir, voto al que consideraba menos peor. Pero un año de este nuevo mandato fueron suficientes para despejar dudas en el electorado: esta gestión no da para más.En este último año los errores han sido grandes y evidentes, y la continuidad en el mandato no estuvo en peligro gracias a la mayoría oficialista en el Honorable Concejo Deliberante, y la tibieza de los opositores, porque la falta de cumplimiento de los deberes de funcionario público es algo fácilmente demostrable: las legislaciones vigentes no se cumplen; el trabajo de algunas áreas que en el mandato anterior mostraban proyectos y actividad han desaparecido (bromatología, cultura, promoción económica, vialidad municipal) a lo que debe sumarse la incipiente y ya interrumpida actividad de pequeñas obras municipales esbozadas en la campaña 2007. Ni los servicios públicos básicos dejan conformes a los vecinos y contribuyentes. Es más, se desconoce los días y horarios en que Grau cumple sus funciones.La gran adhesión y simpatía que protegía a Grau como un alo mágico ha desaparecido. Y la exclamada y reconocida honestidad ahora son palabras que se guardan discretamente ante la suma mensual que percibe por los servicios que presta al común, él y sus funcionarios.Gobierna un intendente ausente y la gestión administrativa está en manos de una funcionaria devenida en una suerte de vice intendenta. El resto de los secretarios y directores tienen un desempeño al que no es necesario calificar, pues la actividad de horario reducido se limita a firmar ordenes y resolver lo temporalmente inminente. Y el desconocimiento de los trabajos de áreas es tan real como la incomunicación entre los funcionarios y el primer mandatario. La actitud autoritaria de Grau se agudizó con el paso del tiempo, y quienes trabajan con él lo saben y adoptan posiciones sumisas. Es un extraño autoritarismo, porque quien desconoce la actividad comunal supondría el ejercicio de fuertes controles sobre los empleados, aún para imponer sus decisiones irreflexivas y caprichosas. Pero no es así. Todo lo contrario. El dejar que todo decante por si solo es el parámetro común. En lo político es totalmente intolerante, y la unión con otros sectores (como el ARI) se resquebraja día a día por cuanto la supuesta integración solo se registra en dos momentos: uno fue en la campaña 2007; y la otra en el HCD cuando requiere del voto de la mayoría para mantener la inmunidad de su gestión.El problema se presenta con miras a las elecciones 2009, porque si bien tiene una gran cantidad de votos cautivos (en los empleados municipales que disfrutan de un trabajo sin exigencias ni horarios), la posición populista ha decaído en este año por falta de dinero y si bien el presupuesto para 2009 es mayor, los gastos en salarios también lo es. Ya no tiene posibilidades de fragmentar para seguir reinando, porque después de la atomización o dispersión radical no tiene posibilidad de generar antagonismos que lo dejen ser victima de otros, para jugar a la novela rosa con los electores. Y la UCR no está dispuesta a recibirlo nuevamente porque jamás considero en su gestión los proyectos de origen partidario. El intendente ha agudizado su visión hegemónica del control y del poder. Los únicos funcionarios que aparentan poder real de gestión son aquellos que defienden un proyecto confuso y contradictorio. Casualmente son aquellos sobre las que caen sospechas por compras sobrevaluadas y por favorecer en adjudicaciones a empresas ineficaces y cuyas obras millonarias sencillamente no funcionan.Mientras, la sociedad espera incomoda alguna señal de ocupación por el bien común.Y esa incomodidad podría traducirse en las urnas si la oposición logra construir una propuesta que vaya mas allá de ciudadanos que quieran hacerse de un puesto para cobrar. De la interpretación de lo que dicen vecinos en diferentes lugares, lo buen visto y esperable en un político elegible, no sería solo la oratoria ni un partido determinado, sino que demuestre que ha resuelto lo económico en su vida particular y esta dispuesto a ‘ponerse la camiseta de 25 de Mayo’, y nos aleje de esta gestión afectada por una narcolepsia crónica, beneficiada por la coparticipación que como una subvención le hizo posible a Grau 9 años en el devaluado sillón de Don Liborio Luna.Aún cuando las elecciones venideras solo sean legislativas, un resultado adverso podría ser para Grau un punto de inflexión que lo posicione más cerca del ideal popular: que ejecute, que proyecte, que gestione, que sea mediador, que dé a conocer su trabajo, que asista a su lugar de trabajo, que reciba a la gente, que genere recursos, que recupere a 25 de Mayo, que deje de financiar actividades privadas o sectoriales que no tienen que ver con el bien del pueblo. La situación de la oposición no es menos problemática porque la gestación de nuevos lideres político está cercada por egoísmos perpetuados en las conducciones y el descreimiento general hacia ellos y los partidos a los que representan. Por esto, hoy más que nunca la ciudadanía debe comprometerse en la participación de una causa común. Termina 2009 y se lleva el ya opaco lustre de una gestión democrática a la que aún le faltan 3 años por recorrer. En el respeto por las instituciones es que el cuerpo legislativo local debe fortalecerse no para criticar y agotarse en ‘chacharas’ de palabras rebuscadas de los figurones, sino en ocuparse de cumplir con su rol y su función. El “agotamiento” del modelo de Grau no ha llegado a su máxima expresión. La improvisación se evidenciará aún más cuando la crisis anunciada para marzo – abril paralice las cuentas municipales. Parece un contrasentido que ante una situación como esta, los medios de comunicación mantengan una actitud servil y de espera. Seguramente la pauta política del 2009 los reavive.
che, nadie leyo porque es largo? Me llevó tres dias. Y bueno, yo que esperaba polemizar. Gracias por subirlo. Saludos. M Pells
ResponderBorrarNO TE PREOCUPES MARTIN SABEMOS QUE DECIS LA VERDAD. PERO LA REALIDAD ES QUE AHORA GRAU SE VISTE CON ROPA AGENA VISTE LA CONTRATAPA DEL DIARIO LA MANANA EL 31 DE DICIEMBRE.
ResponderBorrarY LA GENTE LO SIGUE BOTANDO AUNQUE NO HAYA UN MEDICO EN EL HOSPITAL NI UNA CURITA PARA EL ACCIDENTE QUE TE PUEDE PASAR. O SE PIENSAN QUE NO LES PUEDE PASAR NUNCA. IMBECILES